Dueños de negocio atraparon a ratero, le propinaron una golpiza y luego llamaron a la policía para que se lo llevara
Dos trabajadores de una licorera no lo pensaron dos veces para defenderse de un asaltante que los estaba amenazando con una pistola de balines con una apariencia casi idéntica a un arma real para llevarse el dinero que tenían en la caja registradora.
Fue un tema de segundos. Al ver a su compañero amedrentado por el maleante, el otro que se encontraba en el pasillo se le abalanzó para empezar un forcejeo en el que los dos terminaron reduciendo a impotencia al antisocial con ayuda de repartidoras y demás personas en el lugar.
Pese a que lograron impedir el asalto, no pudieron escapar de recibir lesiones que horas después empezaron a manifestar al bajar la adrenalina.
También han recibido cuestionamientos sobre la forma en que se defendieron y algunos les hacen ver que se les pudo haber ido la mano.
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